Breve historia de Paracuellos de Jarama

               Paracuellos ha sido habitado por distintas especies del género Homo desde el paleolítico. Es en las edades de los metales cuando la presencia se intensifica, especialmente en el calcolítico y la Edad de Bronce. Una vez romanizada la zona el actual territorio municipal parte del ager complutense, probablemente en forma de pagus. De esta característica pensamos que posiblemente tome su nombre el municipio: Pagus Collum. Se sustituye, a partir del siglo XI, el prefijo –Para- que tiene un valor preposicional, con el significado de más allá de, o con un valor direccional interpretando como lugar hacia las colinas o de la parte de las colinas.

Paracuellos de Jarama, años 30

En época emiral, se construye un castillo entre los años 852-886 con la intención de servir en el sistema defensivo de la Marca Media ideado por Muhammad I de Córdoba. Se eligió para ello un cerro con una excelente visión sobre el valle del Jarama. Con sus 1.200 metros cuadrados de planta podía albergar una guarnición. En los alrededores del Castillo surge una población que pasa a manos cristianas en el 1079 perteneciendo a los territorios de los Hita-Armengol. Por la época se cuenta que Santa María de la Cabeza y san Isidro labrador venían a visitar la Virgen del Castillo y la ermita de Nuestra Señora de Belvis. Un siglo más tarde, en 1175 el Rey Alfonso VIII dona la villa y castillo a D. Fernando Martínez de Hita comendador de Uclés. Quince años más tarde pasa a pertenecer a la Orden Militar de Santiago, mediante la donación pos mortem que hacen D. Fernando y su mujer Doña Urraca por la salvación de sus almas. Durante los siguientes 350 años la Orden de Santiago es la propietaria de la entonces llamada Encomienda de Paracuellos.

En el año 1541 el rey Carlos I vende la villa al Mariscal de Castilla, Arias Pardo de Saavedra, convirtiéndose en el Señorío de Paracuellos. Posteriormente por una larga unión de linajes acaba convertido en Marquesado de Malagón. Es en esta época cuando se construyen el Palacio de Medinacelli, la iglesia de san Vicente Mártir y los desparecidos convento delos franciscanos descalzos de san Luis fundado en 1570 y la iglesia de santaAna. En este convento Carreño pintó tres cuadros para su altar mayor. Algunos de los vecinos de Paracuellos destacaron en el ámbito cultural del país: Fray Francisco de Vivar (Historiador del Cister), Fray Pedro de los reyes (poeta), Santiago Martín Sanz (encuadernador de cámara), Miguel de Soria (maestro de obras, responsable entre otros edificios del convento de las Carboneras del Corpus Christi de Madrid) y tiene residentes ilustres como Gaspar de Morales (famoso boticario de la época), Andrés de la Vega (actor y autor de comedias); visitantes de excepción como Santa Teresa de Jesús (amiga personal de Luisa de la Cerda), Fray Julián de Alcalá o Tirso de Molina, entre otros.

Iglesia de santa Ana y Palacio, años 30.

La iglesia de San Vicente, de estilo barroco tardío, comenzó su construcción en 1587. Es una construcción exenta, de planta rectangular, ejecutada mediante muros de carga de ladrillo y cajones de mampostería. Consta de tres naves separadas por pilares y arcos de medio punto, cubierta la central con bóveda de cañón con lunetos, mientras que las laterales presentan bóveda de arista. Actualmente tiene un retablo pintado porque el original fue totalmente destruido durante la Guerra Civil. Este retablo fue construido por el ensamblador y arquitecto de retablos Mateo González en 1608. Estaba decorado con cuadros del pintor toledano Pedro López, discípulo de El Greco, con pinturas del Martirio de san Vicente, la Anunciación y el Nacimiento del niño Jesús. Además, contaba con un altar para el Santísimo Cristo de la Salud, la Virgen de la Ribera, san José, las Ánimas, el santo Cristo de la Torre, san Isidoro y la Virgen del Rosario. Estos altares eran atendidos por las diferentes cofradías, motores importantes de la vida socioeconómica paracuellense a lo largo de los siglos. De todas ellas, solo sobrevive la del Santísimo Cristo de la Salud, la Virgen de la Ribera y san Nicolás de Bari, creada en 1751 y que, gracias a ella, se celebran las fiestas patronales en la actualidad. Cuando surge esta comienza a desaparecer la Cofradía del Santísimo Sacramento que organizaba las fiestas del Corpus.

Iglesia de san Vicente Mártir.

               El Palacio, de estilo herreriano y ha sufrido varias remodelaciones a lo largo del tiempo. En su fachada principal se puede observar el escudo de los Medinaceli. El edificio de dos plantas se desarrolla sobre un monumental patio central castellano, en el cual se puede observar los escudos del Cardenal Tavera, que pago la mitad de los maravedís que costaron la compra de la encomienda de la Orden de Santiago para crear el primer Señorío que su sobrino Ares Pardo Saavedra. Este es el edificio central del Señorío de Paracuellos. Es en este momento cuando se traslada la población paracuellense desde su ubicación original en los alrededores del castillo al emplazamiento actual. Ares Pardo además del palacio, mandó que se edificara frente a este la desparecida iglesia de santa Ana, delante del espacio que actualmente ocupa la casa del guarda, del que Luisa de la Cerda era muy devota. Hacia 1930, el palacio y sus alrededores pasaron a depender del Ministerio de la Gobernación. Tras la Guerra civil, pasó a ser Hogar Batalla del Jarama del Auxilio Social. Al acto de inauguración el 4 de noviembre de 1946 fue presidido por Dña. Carmen Polo de Franco y su hija. En este centro estuvo el dibujante Carlos Giménez famoso por denunciar su vivencia en estos hogares con sus comics. En la actualidad el centro es utilizado con fines educativos dependiente de la Comunidad de Madrid.

Durante la Guerra de Independencia de 1808, Paracuellos es utilizado por los franceses para colocar un destacamento de la Caballeríadel Cuerpo de Dragones. El lugar donde estuvieron estas tropas en Paracuellos se conocía como Eras de Chamberí actualmente están edificadas y solo se conserva una calle con ese topónimo. Desde la Edad Media Paracuellos había pertenecido a la provincia y arzobispado de Toledo, pero en 1813, con la nueva reorganización geopolítica, dejó de estar en el partido de Ocaña y pasó a pertenecer a la Provincia de Madrid.

Durante el reinado de Alfonso XIII, Paracuellos por su abrupto terreno, su río y su cercanía a la capital, se convierte en un lugar idóneo para la realización de maniobras militares. Se hicieron también pruebas de todo tipo de material explosivo, siendo testigo de esta la construcción de un Bunker en las cercanías de la urbanización de los Berrocales de Jarama. Su construcción obedece a la prueba de estos y poder ser utilizados en la guerra que España libraba en Marruecos. Posteriormente, durante la II República, Paracuellos pasa a ser un sitio de recreo para los madrileños, convirtiéndose en una de las playas de Madrid. Es así como acaba siendo propuesto por el GATEPAC, para formar parte del Proyecto de Playas del Jarama y baños populares, junto a San Fernando y la Poveda. Desgraciadamente, la Guerra Civil truncó el proyecto.

El edificio sede del Consistorio, fue inaugurado con gran solemnidad, por el Alcalde Jesús Domínguez, la profesora Escolástica Riera y la hija predilecta paracuellense Antonia Herránz, el 8 de abril de 1928 como Ayuntamiento y Escuelas deprimeras letras. Fue diseñado por el arquitecto modernista D. Julián de Sáez Iturralde. Inicialmente se distribuyeron las dependencias municipales en el centro (despachos, salón de plenos, sala de juzgados, etc.) además de las aulas del colegio público: el ala derecha para los niños y la habitación del profesor, y el izquierdo para las niñas y la habitación para la profesora. Uno de los adornos más importantes con que fue dotado, es un gran reloj en la fachada exterior. Comprado a la casa de Relojes Públicos Blasco y Liza de la localidad tarraconense de Roquetas. El edificio albergó la primera biblioteca municipal.

Niños en la puerta de la Escuela Ayuntamiento, años 60.

Las matanzas de miles de presos que ocurrieron en el municipio durante todo el mes de noviembre de 1936 en la Guerra Civil hicieron que Paracuellos tuviera muy mala prensa en toda España. Esos fusilamientos dieron lugar al Cementerio de los Mártires, en el arroyo de San Miguel. Salvo un pequeño grupo de jóvenes de las JSU que dieron apoyo logístico, los vecinos se mantuvieron al margen de estos asesinatos en masa. El alcalde del momento de producirse los hechos, el entonces alcalde D. Eusebio Aresté sorprendido por lo que estaba pasado, tuvo que ir a Madrid a pedir explicaciones y le dijeron que permaneciese callado, que diera tierra a los muertos si no quería acabar como ellos. Se obligó a hacer esta desagradable labor a muchos vecinos de la época. Después de la guerra fue Eusebio Aresté es encarcelado y ejecutado en las tapias del cementerio del Este de Madrid. Se da la circunstancia por aquellas paradojas de la historia, que el primer alcalde tras la restauración democrática de 1978 que tuvo Paracuellos fue su hijo D. Ricardo Aresté.

Paracuellos cuenta entre sus vecinos, con una figura del toreo de renombre mundial, Francisco Muñoz Herrero, conocido como Paquito Muñoz. Fue contemporáneo de Manolete. Como novillero se vistió de luces por primera vez el 21 de marzo de 1943 en Villafranca de los Barros, pero no haría su presentación en Las Ventas hasta tres años más tarde, el 12 de octubre de 1946. Fue tal la fama que adquirió, que cuanta con su propio pasodoble y la proliferación de peñas por todo el país. Vivió en una gran casa aledaña a la Fuente de la Salud, reconvertida en la actualidad en Hostal-Restaurante.

Paquito Muñoz (3º desde la derecha, de pie) con los vecinos. Años 50.

En los años 80 del siglo pasado Paracuellos es un referente en el mundo académico por las excavaciones paleontológicas de las faunas del Mioceno que se descubrieron una década antes. Estas estas incoadas como Bien de Interés Cultural al tener una secuencias de faunas de todas las épocas de este periodo geológico. Entre los hallazgos se encontraron fósiles de caparazones de tortugas gigantes acompañados de excepcionales mamíferos: Mastodontes, Rinocerontes, Ciervos y Jirafas, felinos y osos-perro eran habituales del término municipal.

En el siglo XXI Paracuellos ha crecido considerablemente quintuplicando su población en los últimos 20 años hasta los 27.000 habitantes en la actualidad. Esto ha propiciado que disfrutemos de personas notorias en distintas facetas culturales. Destacamos nombres de vecinos que viven o han vivido en nuestro municipio de distintos ámbitos: el cine como el director Alejandro Amenábar, creadores de efectos especiales como Colin H. Arthur, los actores Amaia Salamanca y Roberto Álamo, periodistas de renombre como Juan Ramón Lucas y el actual corresponsal de RTVE en Londres Diego Arizpeleta; habituales de la prensa del corazón como Belén Esteban; del espectáculo como Pedro Llamas y Sergio Fernández “el monaguillo” o el torero Fernando Robleño. Contamos con la cantante Rocío Caamaño y el compositor y productor musical Michel Molinera; pintores como José Luis Viejo Palacios o Luis Brea y el escultor Cándido Monge. En deporte destaca el atleta Fernando Carro. Acabamos esta lista con los autores literarios Fernando Marín Rodríguez, Javier Cuesta Moreno, Juan Carlos Garrido del Pozo, o las autoras de libros infantiles, Margarita de Mazo e Inmaculada Muñoz entre otros muchos.

Javier Nájera Martínez y Luis Yuste Ricote.

Cronistas Oficiales de Paracuellos de Jarama.

Bibliografía:

- NÁJERA, J. & YUSTE, L. (2016). Historias de Paracuellos de Jarama. Ayuntamiento de Paracuellos de Jarama, Madrid.